El Perfil del Joven Cristiano: Ejemplo en Espíritu

El Perfil del Joven Cristiano
Construyendo con bases y raíces firmes sustentado en principios bíblicos.
1ª. Timoteo 4:11-16.

por Armando Araujo

Debe ser un ejemplo en: ESPIRITU
Con buen animo, gozoso, alegre, dispuesto a servir

El optimismo, el entusiasmo, la alegría, el estar gozoso y con buen animo son indicadores para que una persona sea catalogada de tener un buen espíritu. El Apóstol Pablo da su consejo a su hijo espiritual Timoteo añadiendo un ingrediente importante “Que sea ejemplo a los creyentes en espíritu”. Aquí no se refiere al Espíritu Santo, ni al espíritu del que estamos conformados como seres humanos, sino más bien se refiere al espíritu que uno puede contagiar a otros para emprender cosas, transmitir entusiasmo en una reunión social, para embargar de animo a los que se sienten decaídos, para llenar de alegría en un momento especial sea en lo familiar, estudios o de competencia y transmitir entusiasmo a los hermanos en la fe.

Pero lamentablemente, algunos no transmiten este buen espíritu, andan más bien con un espíritu de desanimo, como dice algún refrán “Si quieres desanimar a alguien distráelo”. Andan con un espíritu de critica, de discordia, de contienda, de espíritu contencioso, donde el animo lo tienen exclusivamente para crear pleitos, promoviendo la enemistad y dejándose llevar finalmente por el celo, la envidia y la ira. El joven cristiano está llamado a tener un espíritu de amor, de unidad, de servicio, de responsabilidad, siendo de un mismo sentir en Cristo, viviendo en paz los unos con los otros, siendo amables, actuando con humildad y sencillez. Un joven con esta características dentro de su perfil cristiano, es un joven que está lleno y siendo controlado por el Espíritu Santo

Hay que dejar atrás lo que pueda conducir al odio, al orgullo, al celo, a la ira, a la critica, a la contienda, a la rencilla y al enojo, el Apóstol Pablo se refiere a éstas, como acciones y comportamientos del obrar en la carne y no bajo el fruto del Espíritu Santo.

Dios quiere y desea jóvenes cristianos de buen espíritu y de buen sentir, dispuestos a emprender grandes retos para él.

Joven, no hay propósitos en la vida fuera de Cristo Jesús”

armandoaraujocomparte@yahoo.com.co